11:31 pm
Editorial
Una de las banderas políticas de la candidata de Morena a la presidencia Claudia Sheinbaum, es precisamente el plan C. una apuesta peligrosa para infiltrar a la suprema corte de justicia del país desde el partido creado como movimiento para llevar a Andrés Manuel López Obrador por tercera vez a la candidatura presidencial (Morena) y que tendría consecuencias graves para garantizar el estado de derecho.
Según la teoría del Estado señala que no es un Estado de Derecho, aquel lugar donde su sistema judicial está sujeto a las condiciones del ejecutivo y del legislativo, donde el acceso a la justicia es solo para quien lo puede pagar, o donde los compadrazgos y los favores
sociales son los que moderan la
“imparcialidad” de las autoridades judiciales.
En ese sentido la apuesta del plan C queda definida como la perdida del estado de derecho, mediante una estrategia impulsada por el presidente de la república para reformar de forma conjunta con el legislativo la elección de los ministros de la suprema corte de forma directa, con la intención de reformar el poder judicial para nombrar mediante votación a los ministros de la corte.
Según el artículo 115 de la constitución política de 1824 dónde se da el orígen de la Suprema Corte de la Nación indica que “…la Federación deposita para su ejercicio el Poder Judicial en una corte suprema de justicia, y en los tribunales y juzgados que se establecerán en cada caso”. Es decir, el poder de la Corte provenía de la Federación y los poderes constituidos.
Con ello constitucionalmente queda solventada como depositaria la suprema corte de la acción de la justicia de la Nación, de forma tal que cuando la elección de sus integrantes se da como un diseño institucional desde 1857 de forma indirecta en primer grado, es decir es una elección en la cual los ciudadanos no votan directamente por un candidato, sino que eligen a representantes que a su vez elegirán al candidato final, siendo este precepto el que se quiere modificar con el plan “C” vulnerando el Estado de Derecho y poniendo en riesgo de fanatismo electoral la viabilidad de la Nación.
Sin embargo, aún cuando se dé la elegibilidad si no se logra el consenso en la cámara de diputados la constitución permite que sea el presidente en turno como en el caso de la ministra Lenia Batres, quien es ratificada por el congreso.
Y si en lugar de la suprema corte hubiera sido el ejército?
La metáfora:
Imagínate un momento un México en el que el ejército de mexicano no hubiera cedido ante las peticiones del presidente de la república para la realización de funciones adicionales para lo que fue formado y facultado.
Que pasaría si el ejército se hubiera negado a la realización de las grandes obras como el AIFA y el Tren Maya, poniendo en juego el prestigio de la institución, por cierto de las más respetadas en el país por sus ciudadanos.
Si no hubieran regresado al general Cienfuegos después de su detención ante las autoridades americanas con acusaciones de narcotráfico.
Si el ejército hubiera resistido poner en marcha la guardia nacional y si se hubiera negado a la política de abrazos no balazos…
Exactamente!!, el presidente hubiera arrancado con toda la fuerza del Estado el plan “C” contra el ejército y entonces para la promoción de generales en el organigrama de la secretaria de la defensa nacional se hubiera propuesto una reforma a la ley orgánica del ejército y fuerza aérea.
En esta propuesta el presidente negaría su propia potestad de elegir de forma indirecta en primer grado al secretario de la defensa y lo pondría a disposición de la voluntad popular.
Y cuestionaría el porque los generales no salen al escrutinio público, si su trabajo tiene que estar revisado por la ciudadanía, y muchos son afines a la Cuarta Transformación que ellos debieran de salir a buscar a los ciudadanos a las plazas públicas para buscar ser generales y de ahí poder aspirar a buscar la titularidad de la SEDENA.
En esta línea de ocurrencias para 2024 tendríamos en la boleta no solo a Claudia, sino a ministros de la corte y al los aspirantes para ser secretario de la defensa nacional, cada uno con los membretes de la Cuarta Transformación y otros tantos por el Frente por México.
La realidad…
Ninguna de las dos candidatas a la presidencia de la república han documentado la oposición que representa la elegibilidad directa de los magistrados de la suprema corte, lo que será sin duda un punto neurálgico en la campaña presidencial de 2024.
Sin duda sí, el ejército y la suprema corte son en la práctica los contrapesos junto con el INE y la sociedad civil es tiempo de que se hagan valer a las instituciones, porque de no ser así si la candidatura de Claudia gana en 2024 estaría en riesgo no solo el modelo constitucional de la suprema corte, sino de cada una de las instituciones del país pasando a ser la nación de una sola persona y excúsame decirte que esa #EsClaudia.
El traidor: El diario secreto del hijo del Mayo Pasta blanda
Precio: $279 Envio Gratis
Comprar en AmazonXiaomi REDMI Note 10 128GB Blanco Camara cudruple de 48 Megapixeles.
Precio: $ 4699.00 Entrega GRATIS
Comprar en Amazon